jueves, junio 18, 2009

Por un puñado de polvo

Acaban de dar un premio
a una actriz del gremio de la zeja
y ésta ha acudido a recibirlo
ataviada con su ropa de trabajo:
Ha ido vestida de prostituta.

martes, junio 02, 2009

Retazos de un final

El hombre vive
en permanente celo
y ellas lo saben.

Los cazadores respetan la veda
de las presas porque saben
que no pueden defenderse
cuando están en celo.
Pero ellas no le respetarán a él.


Cazar a un hombre es como pegar a un niño.
No importa.
El hombre no tiene quien le proteja.


El músculo es culpable, dicen.
Sus másculos, sin embargo,
son esforzadamente inocentes.


El arma del amor

Volvió a casa
vencedor de cien batallas
buscando el merecido descanso
y se entregó al amor.

Se entregó a él desarmado
y eso le costó la vida.